El lienzo más humano

Utilizar la piel como lienzo en el que plasmar arte y pensamiento ha estado presente a lo largo de la historia del ser humano. Desde la prehistoria y antes de conocer otras formas de expresión, el pintarse caras y cuerpos ya imaginamos que fue un modo inicial de establecer contacto entre todos. Pinturas de guerra, de protección o en rituales cubrían su piel. En la actualidad el arte corporal continua vigente entre grupos tribales y también como forma de expresión de algunos artistas europeos. En este caso podemos admirar algunas de las obras de Gesine Marwedel, una chica alemana que encontro su inspiración cuando trabajaba en un orfanato indio. Sus pinturas las realiza en colores eudérmicos, naturales, cuya base es el agua mineral y el barro termal. Obras de arte en movimiento con toda clase de detalles. Esta artista desarrolla su creatividad sobre el cuerpo humano al que convierte en maravilloso lienzo. Lo trabaja mediante el bodypainting, tanto realista como surreal...